Anhelo:



No solo tus besos, tus sonrisas, tus ojos... sino también tus palabras, la forma en la que haces que me sienta bien, que consiga respirar y cicatrizar esas heridas que seguían abiertas, la manera en la que me miras. Haces que cada día sea especial, creas un anhelo en mi interior que florece cada mañana al despertar y va aminorando en el momento en el que puedo observarte, mirar a través de tus ojos y ver a través de ti, no es algo difícil, simplemente eres quién eres.

Muchos momentos duros que he pasado me han llevado a ti, circunstancias que han valido la pena por tenerte cerca de mí, por sentir tus brazos a mi alrededor arropando cada momento, con la calidez de tus caricias y transormándonos en uno solo. No es de extrañar que nos complementemos tan bien, que incluso pensemos determinadas cosas al mismo tiempo y que soñemos casi los mismos sueños, es sorprendente pero nuestra conexión no es tan solo una cuerda que nos acerca poco a poco, estoy convencida que siempre ha estado ahí, tan inquebrantable y sedienta de tenernos juntos que se ha vuelto de metal.

Por mucho que otros crean que ha sido precipitado o que repitan cada vez los mismos temas, no me importan lo más mínimo porque son decisiones nuestras y de nadie más aunque les encante meterse en medio, nada de eso resulta importante cuando nos miramos y sonreímos, cuando alguno de los dos hace una tontería y el otro termina riéndose a carcajadas. También están los detalles, aquellos que se expresan sin pensar pero que para el otro terminen siendo algo más que detalles, destellos del interior de la persona que brillan sin tan siquiera pedirlo, quieren ser compartidos, son aquellos por los que amas más a la otra persona sin poder evitarlo. Las manías terminan siendo incluso, hasta graciosas, ni qué decir de tu voz o de las diferentes formas en las que ríes, no cambiaría esas sensaciones que me haces sentir en cada momento por nada del mundo.

Las palabras iniciaron nuestra relación, tanto desde un principio como hace unos meses. Quizá no nos dimos cuenta o fui yo la que no lo hizo, pero ya teníamos una relación sin siquiera saberlo. No podía dejar de preocuparme por ti, de sentir miedo o inquietud cada vez que desaparecías unos meses sin mediar palabra, no podía evitar entristecerme cuando pasabas por un mal momento o cuando simplemente, estabas resfriado y echado en el sofá con fiebre, deseaba estar a tu lado para cuidarte pero la distancia nunca nos lo permitió y tampoco las circunstancias. 

Las palabras siguen siendo las protagonistas, pero tampoco las necesitaríamos, ¿verdad? La complicidad ha formado parte de nuestras miradas, ni la oscuridad podría apagar la llama de nuestros sentidos, nuestros sentimientos o aquello que más anhelamos y es estar juntos de una vez, algo que llevábamos planeando desde hace mucho tiempo. 

Esa especie de certeza que nos persigue allá donde vamos, como algo que surge de dentro y nos dice que somos los indicados, que por algo siempre hemos estado unidos. Nos hemos sentido incluso en la distancia, seguimos nuestras conversaciones y tu sonrisa me deja sin palabras. No se te puede comparar porque eres tú y siempre lo has sido, el único que me ha hecho sonreír cuando he estado jodida, el que me ha abrazado cuando he llorado y el que me hace unos recibimientos dignos de agradecer.

Sé que parece que sea algo avariciosa, pero anhelo todo eso cada día, desde las caricias hasta ese preciso momento en el que nos paramos en medio de la calle, tus manos acarician mi cara y tus labios rozan los míos con total suavidad haciendo que el resto del mundo deje de existir, haciendo ese momento perfecto y es algo que puedo sentir contigo, por cada poro de mi piel. He de decir que, tan solo sueño con el día en que nuestras miradas se crucen cada día, que nuestras sonrisas se crucen a todas horas y que no podamos disimular cuánto nos amamos cuando estemos con otras personas. ¡Espero que se cumpla!


Espero que os haya gustado esta especie de declaración o como queráis llamarlo, es mucho más bonito cuando le pones palabras a estos sentimientos, ¿verdad?

Comentarios

Entradas populares de este blog

Delincuencia Convencional y No Convencional:

TAG del Metalero:

Serie "El Mentalista":